Manifiesto sobre las violencias contra las mujeres

 

Hoy, como cada día, denunciamos las múltiples formas en las que los hombres ejercen violencia contra las mujeres. Denunciamos, de esta forma, el sistema cis-hetero-patriarcal1 que perpetúa esta estructura de poder que se vuelca contra nosotras: un sistema sustentado por el modelo de masculinidad hegemónica. Un modelo que trasciende los cuerpos de los hombres para permear todo el sistema de prácticas y significados en nuestras sociedades y que sitúa todo aquello relacionado con lo femenino como algo inferior, secundario y al servicio del poder.

Repudiamos un sistema que nos hace doblemente víctimas: víctimas de una estructura social y responsables de nuestra propia situación de subordinación. Sin embargo, nosotras lo tenemos claro: la responsabilidad de la opresión recae en el grupo que oprime, no en el grupo oprimido. Rechazamos los discursos que nos hacen responsable de este patriarcado que nos oprime y sabemos señalar al privilegiado.

El patriarcado ha hecho contemplar la categoría “mujer” como un todo homogéneo, pero nosotras sabemos que no lo somos. Somos diversas. Somos plurales. Y celebramos esa diversidad. Reconocemos nuestros lugares de privilegio y opresión: dos partes dialécticas que convergen y conviven en nuestros cuerpos.

Sabemos que nuestras resistencias son múltiples y variadas. No queremos un modelo de resistir que nos oprima: nuestro propio acto de (sobre)vivir es una forma de resistencia. Reconocemos la agencia de las mujeres y otros cuerpos oprimidos por el sistema patriarcal. No aceptamos modelos de liberación: nuestra emancipación está en nuestros cuerpos. Queremos trazar un verdadero contra-discurso a la hegemonía del poder y para eso sabemos que tenemos que redefinir lo que entendemos por resistencia: no nos definimos bajo los parámetros que dicta el patriarcado. Existir es resistir. Confrontar es resistir. Reparar es resistir.

Nos reconocemos como anarco-feministas. Pensamos que los principios, tácticas y finalidades del anarquismo y del feminismo son los mismos: visibilizamos las relaciones de poder, apoyamos a los grupos oprimidos (de los que muy frecuentemente participamos) y destruimos el patriarcado y todas las estructuras de poder, dominio y sumisión que con él convergen.

Para ello, no olvidamos una genealogía de mujeres maravillosas, que contribuye a crear nuestra conciencia feminista y nuestro legado de mujeres sabias. La revolución no es el futuro, es el presente, y la construimos todos los días. Nuestra compañera Lucía Sánchez Saornil lo decía, “está bien esperar la revolución todos los días; pero mejor aún es ir en su busca, forjándola minuto a minuto en las inteligencias y en los corazones”.

Sabemos que la alianza anarcofeminista es interseccional (“las herramientas del amo no destruyen la casa del amo, como dice Audre Lorde) y la construimos desde los cuerpos oprimidos por el sistema patriarcal: mujeres, trans, bolleras, lo queer2, lo crip3, las pobres, las negras. Las subordinadas, las oprimidas. Desde la horizontalidad, el apoyo mutuo, la sororidad4 y las ansias por la transformación social: defendemos nuestra alegría, organizamos nuestra rabia. Esta es nuestra revolución y es imparable.

¡Contra las violencias machistas, autodefensa feminista!

1Cis: Cisgénero abreviado, persona que se identifica con el género que socialmente se le ha asignado, es decir, que no es trans. Viene del latín, “de este lado”. Género es la identidad s que se le atribuye socialmente a les individuos de un grupo social. En el caso que nos concierne, es sobre la identidad sexual que se le atribuye a cada persona por su sexo físico en el nacimiento.
Patriarcado: predominio de la autoridad del varón en una sociedad.

2Queer: Término que viene del inglés (“rarito” en un sentido peyorativo), hace referencia a los movimientos que ponen en duda y rechazan la identidad sexual que establece los roles de género y la marginacion que establece la sociedad patriarcal contra sus disidentes. La palabra se adoptó por movimientos de homosexuales y feministas como modo de transgresión contra el género.

3Crip: Deriva del inglés nuevamente, de “cripple”, tullido. El feminismo procura recoger la marginación de personas con cuerpos con alguna diversidad funcional (término no ofensivo que se refiere a las personas señaladas con "discapacidad"), no sujeto al modelo patriarcal de cuerpo completo o perfecto, y que es marginado por ello.

4Sororidad: Solidaridad y apoyo mutuo entre mujeres.