La Marcha a la Cárcel de Albolote fue prohibida

Todos los años la CNT-AIT Granada procura realizar una Marcha a la Cárcel de Albolote para denunciar la situación de las prisiones, informar de las actualizaciones de la lucha anticarcelaria y tomar contacto con familiares y afinidades de las personas presas que acuden a realizar sus visitas.

Así fue que en el marco del Octubre Rojinegro se convocó la Marcha de este año y se comunicó a la Subdelegación del Gobierno nuestra intención de realizar una concentración en el parking de la prisión, como suele ser habitual. Cumplimos nuestra obligación.

Sin embargo, este 6 de Octubre iniciamos la Marcha y cuando llegamos a la prisión, la Guardia Civil nos dio el alto en la entrada de la última vía que lleva al Centro Penitenciario y nos comunicó que no podíamos realizar el acto, pues la Subdelegación no había informado (ni positiva ni negativamente) de la concentración, y el Director, aludiendo a la falta de ese papel, no iba a permitir que ejerzamos protesta ninguna ni ningún derecho de reunión (¡se vaya a pensar la gente que en la cárcel hay derechos!).

Comunicamos a l@s agentes que a veces ocurre que la Subdelegación no se pronuncia y en tales casos se permite la concentración, ya que en España el derecho de reunión es algo que se comunica, no solicita, y que se hace así para que las autoridades puedan dar facilidades en hacer compatible tanto el derecho de reunión como el de movilidad de las demás personas, y que no tener ese "permiso" no supone delito ni prohibición alguna, sino que l@s asistentes tendrán que autoorganizarse para dar esas facilidades. Perjuicios, daños y delitos son penados haya o no haya "autorización"  de la Subdelegación, pues todo lo tipificado en las leyes y Código Penal se aplica a todo el mundo, aunque se acojan al Derecho de Reunión. Por tanto, la autorización expresa de la Subdelegación no es ni nunca ha sido un requisito para ejercer el Derecho de Reunión, pero se debe comunicar, por si se debe prohibir por algo de la comunicación que no se pueda hacer, o porque ya se haya solicitado un acto en el mismo sitio y hora, y no es posible hacer el acto tal como se comunica. Por eso es aconsejable hacer la comunicación a la Subdelegación del Gobierno, pero nunca jamás se trata de un requisito que la población infantilizada debe realizar hacia la Autoridad paternalista.

La Guardia Civil tomó los datos de much@s de l@s presentes cuyos coches llegaron, y se negaron a que se hiciera el acto, aduciendo a las normas del perímetro de Seguridad que exige el Centro Penitenciario (se les mostró la solicitud que presentamos a la Subdelegación). Por lo que tuvimos volver ante la imposibilidad de poder ejercer un derecho fundamental como es el de Reunión y Libre Expresión, que no debe de existir en ese perímetro, lo que confirma todo lo que decimos de lo que ocurre en las cárceles. Debe tener también relación con la actitud de l@s funcionari@s de prisiones, que llevan meses exigiendo que las familias de l@s pres@s no celebren la libertad en el parking, porque "dejan suciedad" en referenia a confetis y elementos semejantes. Básicamente, que les molesta que se use el parking para celebraciones de gente que igual no les simpatiza (pres@s ni afines, gitan@s, anarquistas...).

Vamos a volver a realizar la Marcha a la Cárcel tras el Octubre Rojinegro, y aprovechar las jornadas para involucrar más gente. Se está valorando ejercer acciones contra las autoridades, pues la comunicación a la subdelegación se hizo y no podemos hacer nada más administrativamente, por lo que se ha vulnerado claramente nuestros derechos y nuestra libertad de protestar, y que se puede y va a ir repitiendo con el solo hecho de que la Subdelegación no responda, una y otra vez.

La lucha anticarcelaria es molesta para las autoridades y es normal que ocurran incidentes como estos. Ante ello, se debe insistir, apoyar y actuar en consecuencia, porque el objetivo de ell@s es la represión y el nuestro la libertad, y eso no se consigue ni avanza con buenos deseos.